El Procesador de Texto se define como el programa que permite redactar, editar, dar formato, imprimir y compartir documentos. Con su aprendizaje se pretende que el estudiante sea capaz de decidir en qué circunstancias es apropiado utilizar este programa para elaborar documentos que cumplan ciertas especificaciones. El estudiante competente en esta herramienta debe conocer, identificar, manipular y aplicar con destreza las funciones básicas y avanzadas que ofrece.

Según Sara Dexter, a medida que los docentes diseñan actividades de aprendizaje que integran el Procesador de Texto como un procesador de ideas deben procurar que el uso de éste mejore el proceso de pensamiento de los estudiantes, así como sus logros académicos. Sin embargo, los maestros deben hacer un esfuerzo para que, durante las clases, los estudiantes mantengan el foco en el propósito y el contenido de la comunicación y no en las características atractivas del software.

La mayoría de los estudios sobre el efecto del uso de computadores en la escritura de los estudiantes contempla tres variables: cantidad de texto, calidad de la escritura y número de revisiones.

Respecto a la primera variable, hay suficiente información que indica que los estudiantes escriben más cuando se compara el número de palabras producidas entre quienes utilizan un computador y quienes usan lápiz y papel. Por lo tanto, los estudiantes que usan los procesadores de texto para escribir, tienden a producir textos más extensos que los estudiantes que escriben con lápiz y papel [1].

Respecto a la calidad de la escritura, se encuentra que este efecto tiende a ser mayor en los estudiantes que están en los grados de educación básica secundaria y superior, que en los estudiantes de básica primaria [1]. En lo que tiene que ver con la cantidad de revisiones de un escrito, se encuentra que los estudiantes efectúan más cambios en los borradores de sus escritos cuando utilizan procesadores de texto que cuando utilizan lápiz y papel [1].

NOTAS:
[1] Arnie Goldberg, Michael Rusell Y Abigail Cook (2003). El efecto de los computadores sobre la escritura de los estudiantes. Revista de Tecnología, Aprendizaje y Evaluación (JTLA).

Autor: Juan Carlos López García