Introducción

Hablar de uno mismo es complicado, ya que siempre tendemos a describir nuestras cualidades, y si a uno que otro se nos ocurre describir nuestras oscuridades, pues no tarda alguien en decirnos que somos seres infelices, que necesitamos autoestima y asistir a seminarios de superación personal. La realidad aterra, por eso mismo a muchos les aterra a primera instancia el pensamiento del filósofo que abordaremos en nuestra pequeña reflexiva. Cioran es un pesimista en todo el sentido de sus escritos, pero a la vez es un realista buscando la tranquilidad de su espíritu. Nos basta recordar que cada ves que se le preguntaba sobre el sentido de su pensamiento y la importancia del mismo, siempre afirmaba que no debería ser leído por nadie, ya que sus escritos eran creación de momentos oscuros, de esos que todos tenemos día a día. Por todo ello, reflexionaremos sobre la importancia de su pesimismo que no es otra cosa más que un pensamiento del cómo es la realidad: mala, obscena, llena de traiciones, con megalomanías terroríficas, y demás infiernos humanos. También reflexionaremos sobre esas condiciones monstruosas humanas, y como Cioran era un simple hombre que escribía sobre sus preocupaciones, ya sean nocturnas o existenciales de su propia vida.