Introducción

¿QUE ES EL ARTE?

Existen muchas formas diferentes de arte y muchas formas de expresión: la música, la pintura, la escultura, el cine o séptimo arte, las artes escénicas y bellas artes… y por ello es complicado dar con una definición de arte exacta. Podríamos decir que el arte es una forma de expresión, sin duda, y después identificar como arte cosas tan diferentes como unos sencillos bocetos a lápiz, unas acuarelas, unos retratos realistas o abstractos, una escultura, una obra arquitectónica… Pero, aunque queda claro que el arte puede ser algo subjetivo, sí que hay mucho que aprender sobre él: los elementos básicos del arte, como explorar formas y texturas, la teoría y la perspectiva del color…etc.

Imagina un mundo sin ninguna obra de arte en absoluto: no habría fotografías, ni pinturas que decoraran las paredes, ni esculturas, ni imágenes en los anuncios… Sería horrible, ¿no? Por suerte el arte nos rodea por todas partes, y por eso es muy importante que los niños aprendan a identificarlo y a trabajar con él desde una edad temprana. Y no importa tanto que los niños sepan definir los conceptos o no, ya que una de las particularidades más interesantes del arte es que muchas veces es de libre interpretación. Según quién vea una obra de arte, por ejemplo, su interpretación puede ser distinta y procedente de personas de cualquier edad y nivel cultural. Eso sí, al aprender sobre arte podremos entender mucho mejor una pintura o una escultura, y descubrir aspectos que podríamos haber pasado por alto a simple vista y sin formación.

LOS PRINCIPIOS DEL ARTE 

Los principios del arte representan cómo el artista usa los elementos para crear un efecto y ayudar a transmitir su intención. Los principios del arte y el diseño son: equilibrio, contraste, énfasis, movimiento, patrón, variedad y unidad. Veamos más sobre todos ellos.

EL equilibrio es uno de los principios del arte que describe cómo los artistas crean peso visual en sus obras. Esto quiere decir que los artistas piensan en cómo equilibrar sus obras de diferentes formas, entre ellas, utilizando elementos como la línea o el color.

El contraste es uno de los principios del arte que sirve para crear entusiasmo e interés en las obras de arte. Dos cosas que son muy diferentes tienen mucho contraste, por ejemplo: el blanco y el negro tienen el mayor de los contrastes posibles, aunque los colores complementarios también pueden tener un alto contraste. Los contrastes no solo se dan con colores, tenlo en cuenta, y una diferencia de textura (como rugoso y suave), o de líneas y formas, también puede ser un recurso para crear contrastes.

La armonía o unidad es otro de los principios fundamentales del arte, y es la sensación de que todo en la obra de arte funciona en conjunto y parece que encaja. Los elementos armoniosos tienen una relación o progresión lógica, es decir, que de alguna manera trabajan juntos y se complementan entre sí.

El movimiento o ritmo visual nos hace pensar en los ritmos que escuchamos en la música o el baile, pero también se dan en otras disciplinas. Los artistas crean ritmo visual también en sus obras repitiendo elementos de arte y creando patrones. Usar elementos de arte para dirigir el ojo del espectador a lo largo de un camino determinado a través de la obra de arte, hace que pueda surgir y mostrarse movimiento, acción y dirección.

Los artistas crean patrones repitiendo una línea, forma o color una y otra vez. Repetir elementos de arte de manera regular o cíclica se hace para crear interés, movimiento y/o armonía y unidad. Los ritmos pueden ser aleatorios, regulares, alternos, fluidos y progresivos. Las clases de patrones incluyen mosaicos, celosías, espirales, meandros, ondas, simetría y fractales, entre otros.

La proporción es uno de los principios del arte que describe el tamaño, la ubicación o la cantidad de una cosa en comparación con otra. Por ejemplo, podemos medir la proporción y la escala observando qué tan ancha es una obra en relación a su altura. Se cree que algunas proporciones, como la llamada “proporción áurea” o “regla de los tercios”, son más agradables a la vista humana y con un aire más natural.